El Departamento del Tesoro y el Servicio de Impuestos Internos (IRS) de Estados Unidos han dado un paso importante en la regulación de las criptomonedas al presentar un conjunto de propuestas que afectarán a los intermediarios de activos digitales. Estas regulaciones requieren que los corredores de criptoactivos, incluidas las plataformas de negociación y los procesadores de pagos, informen sobre ingresos brutos a partir del 1 de enero de 2025 y ganancias y pérdidas a partir del 1 de enero de 2026.
El objetivo de estas regulaciones es proporcionar una mayor claridad y niveles de cumplimiento en el espacio de las criptomonedas. Se espera que las regulaciones faciliten el seguimiento y la tributación de las ganancias obtenidas por los contribuyentes, brindando al IRS una visión más precisa de los ingresos generados en el comercio de criptoactivos.
La Oficina de Rendición de Cuentas del Gobierno de Estados Unidos ha respaldado la necesidad de regulaciones más estrictas en torno a las criptomonedas, especialmente en los mercados al contado de criptoactivos sin seguridad. Este informe destaca las preocupaciones sobre la estabilidad financiera y la protección de los usuarios en un mercado que ha experimentado caídas de precios y quiebras.
Por otro lado, las criptomonedas y la tecnología blockchain prometen transacciones más rápidas y económicas, pero también han generado incertidumbre regulatoria. Estas nuevas regulaciones buscan abordar estas preocupaciones y equilibrar la innovación tecnológica con la protección del consumidor.
Las pequeñas empresas de EE.UU. tienen la oportunidad de expresar sus opiniones sobre estas regulaciones, y se ha programado una audiencia pública para el 7 de noviembre de 2023. A medida que la regulación de las criptomonedas continúa evolucionando, la industria se enfrenta a un mayor escrutinio y la necesidad de cumplir con las normativas gubernamentales para mantener la confianza de los inversores y garantizar la estabilidad financiera.