En un giro de eventos inesperado, Alphabet Inc., matriz de Google, ha sido recientemente rebajada de «out perform» a «market perform» por la firma calificadora Bernstein. Los analistas sostienen que Alphabet se aventuró prematuramente en el ámbito de la inteligencia artificial (IA), ignorando varios riesgos y fallas potenciales. Esta conclusión parece basarse en la percepción de que Alphabet ha pasado «de lento a demasiado rápido», planteando problemas con la monetización de sus anuncios en la plataforma.
La segunda rebaja en la calificación de Alphabet llegó en sucesión rápida, con UBS bajando su calificación de «positiva» a «neutral». La reacción del mercado fue negativa, resultando en una caída del 1.5% en el precio de la acción de Alphabet. Los analistas de Bernstein sugieren que la rapidez de Alphabet para incorporar la IA en sus productos básicos ha creado una «bolsa de aire» que distorsiona los precios de los anuncios en la plataforma.
El cambio abrupto de Alphabet hacia la IA ha llevado a los analistas a poner en duda el desempeño de la tecnología dentro de la empresa. Este escepticismo está relacionado con el hecho de que la monetización aún no se ha estabilizado, lo que dificulta la evaluación precisa del impacto de la IA en los resultados financieros de la empresa. La rápida transición de Alphabet hacia la IA fue en parte provocada por la necesidad de competir con otros chatbots, como ChatGPT, después de su propio retraso en la carrera de la IA.
A pesar de estos contratiempos, Alphabet ha lanzado Bard, su chatbot que espera competir con ChatGPT. Aunque Bard ha experimentado una serie de errores, Alphabet ha trabajado incansablemente para mejorar su rendimiento. Sin embargo, Bernstein advierte que la rápida adopción de Google en la IA puede llevar a varios riesgos no evaluados, lo que significa que el sector debe observar cómo se desarrolla esta tecnología en la plataforma en los próximos meses.
A pesar de estas preocupaciones y de las recientes rebajas, Alphabet aún se ve positivamente desde Wall Street. Según Bloomberg, el 85% de los analistas todavía recomiendan comprar la acción, reflejando un sentimiento alcista dominante en el mercado. Además, Bernstein anticipa que el optimismo hacia la calificación de Google «volverá pronto», y que la actual incertidumbre puede ser solo un contratiempo temporal.