El Banco de Canadá ha elevado su tasa de interés a un 5%, el nivel más alto en 22 años. La decisión fue tomada por el Consejo de Gobierno del Banco de Canadá, que se reúne ocho veces al año para discutir la política monetaria del país.
La tasa de interés es el costo que los bancos pagan por pedir prestado dinero del banco central, y afecta a los préstamos y las hipotecas que los consumidores y las empresas pueden obtener.
El aumento de la tasa de interés se produce en un momento en que la inflación en Canadá ha superado el objetivo del Banco de Canadá del 2% durante varios meses consecutivos.
El aumento de la tasa de interés tiene tanto pros como contras. Por un lado, el aumento de la tasa de interés puede ayudar a frenar la inflación, ya que los préstamos y las hipotecas se vuelven más caros, lo que reduce la cantidad de dinero que las personas y las empresas pueden gastar.
Además, el aumento de la tasa de interés puede atraer a los inversores extranjeros, lo que puede fortalecer la moneda canadiense y hacer que los productos canadienses sean más atractivos en el mercado mundial.
Por otro lado, el aumento de la tasa de interés también puede tener efectos negativos. Los préstamos y las hipotecas se vuelven más caros, lo que puede desalentar a las personas y las empresas a pedir prestado dinero.