En un análisis revelador, Scotiabank señala que la política monetaria en Canadá podría haber adoptado una dirección menos restrictiva si los funcionarios electos hubieran mostrado moderación en el gasto en años anteriores.
La institución financiera, en su análisis detallado, subraya cómo las decisiones políticas y fiscales han dejado una marca significativa en la flexibilidad del banco central.
Este análisis agudo arroja luz sobre el delicado equilibrio entre la política fiscal y monetaria en el país norteamericano.
El informe de Scotiabank destaca los pros y contras de la falta de restricción en el gasto gubernamental. Por un lado, el gasto desmedido puede impulsar el crecimiento económico, generando empleo y prosperidad.
Sin embargo, el costo asociado radica en una política monetaria más restrictiva para contrarrestar el riesgo de inflación.
Esto podría afectar las tasas de interés y, en última instancia, la estabilidad financiera. Un ejemplo específico podría ser el aumento en la deuda pública, generando presión sobre el Banco de Canadá para tomar medidas más cautelosas.