La red de capa-2 de Ethereum, Base, se vio sacudida hoy por una interrupción que dejó a muchos cuestionando su fiabilidad en comparación con otras soluciones blockchain. El incidente, que duró 30 minutos, generó una preocupación momentánea en la comunidad de criptomonedas. Según el equipo de Base, el problema se debió a una actualización necesaria en su infraestructura interna, lo que provocó un retraso en la producción de bloques. A pesar del revuelo, aseguraron que «no hay fondos en riesgo».
Esta interrupción plantea un dilema para los entusiastas de las soluciones de capa 2 de Ethereum. Por un lado, estas capas ofrecen transacciones más rápidas y económicas, pero, por otro, como señaló Matt Willemsen, jefe de investigación de Collective Shift, en un tweet, no son equivalentes a la red principal de Ethereum en cuanto a seguridad y confiabilidad. Los usuarios deben ser conscientes de las diferencias antes de adentrarse en estas soluciones.
Base, lanzada por Coinbase hace menos de un mes, ha tenido un ascenso meteórico, registrando volúmenes diarios de transacciones que superan a Ethereum en ciertos momentos. Sus asociaciones con marcas de renombre y la adición de soporte nativo para USDC han aumentado su popularidad. Sin embargo, este incidente es un recordatorio de que incluso las redes más nuevas pueden experimentar problemas técnicos, lo que sugiere que aún deben madurar para competir con soluciones más establecidas.
A pesar de la comparación con otras soluciones blockchain, como Solana, que ha experimentado problemas similares, Base parece haber manejado la situación de manera eficiente y transparente, lo que puede fortalecer la confianza en su comunidad. Sin embargo, esta interrupción plantea la pregunta crucial de si las soluciones de capa 2 pueden realmente igualar la estabilidad de la red principal de Ethereum y si los usuarios están dispuestos a asumir los riesgos asociados.