Signal es una aplicación de mensajería libre y de código abierto, centrada en la privacidad y que ofrece máxima seguridad en comunicación. En las últimas semanas se ha popularizado su uso debido a los recientes cambios de política de privacidad de WhatsApp.
Su éxito ha alcanzado ya los primeros lugares de descarga en la App Store de Apple, superando ampliamente a WhatsApp y otras aplicaciones similares. Este comportamiento demuestra, cada vez más, la importancia que los usuarios dan a la privacidad de sus comunicaciones y datos personales.
Esta semana Signal vuelve a ser noticia, con la información del desarrollo de un servicio, para sus usuarios, de pagos en criptomonedas. De acuerdo a un informe publicado recientemente, Signal estaría realizando pruebas piloto de su token en MobileCoin que esta basado en Stellar.
Aunque el CEO de Signal, Moxie Marlinspike, no ha confirmado esta información, tampoco la ha negado. Marlinspike se ha referido a esta posibilidad como “exploraciones de diseño”. Posteriormente comentó que, si decidieran construir esta posibilidad, “trataríamos de pensar con mucho cuidado cómo lo haríamos. Es difícil ser totalmente hipotético.”
Privacidad vs Regulación.
En este contexto, no parece ser inminente la incorporación de un sistema de pagos digitales en esta plataforma de mensajería. Signal argumenta, internamente según el informe citado, que esta seria una forma de ayudar a personas de países en desarrollo a transferir fondos con facilidad.
Sin embargo, esta sería una estrategia de crecimiento de la propia aplicación. Esta experiencia ya ha sido probada por otras plataformas como Facebook, al desarrollar su propia criptomoneda denominada diem (antes conocida como Libra).
Facebook ha tenido que realizar numerosas correcciones a su proyecto luego de una fuerte presión regulatoria por parte del senado de Estados Unidos.
En este sentido, la implementación de pagos en criptomoneda en Signal, puede traer consigo un escrutinio regulatorio más riguroso. Este sistema, aviva temores entre instituciones financieras y gobiernos, por los efectos que este pudiera tener en los sistemas de pago convencionales.
Algunos expertos consideran que la debilidad de este sistema, es precisamente que los pagos sean simples y seguros y, potencialmente, imposibles de rastrear. Este es el argumento usado por algunas autoridades para proponer controles estrictos sobre estos sistemas de pago.
Al existir la posibilidad de pagos anónimos en esta plataforma, se puede correr el riesgo de convertirse en refugio para actividades ilícitas.
Algunos empleados de Signal consideran que la investigación del uso de criptomonedas en la compañía, es una apuesta arriesgada. Opinan que esto podría invitar a actores fraudulentos a la plataforma y atraer escrutinios más rigurosos.
Esta situación surge en momentos cuando gobiernos del mundo critican los servicios de cifrado, exigiendo tener acceso a estos servicios por seguridad pública.
En definitiva, si Signal decide implementar un sistema de pagos en criptomonedas, se enfrenta a varios retos importantes. Conciliar su fortaleza de privacidad y seguridad de comunicación, con la necesidad de cumplir con los requerimientos de los estados en materia de seguridad financiera. No es tarea fácil.
Como casi todas las aplicaciones, los términos de esta compañía establecen que la aplicación no puede ser usada para violar la ley. Sin embargo, la empresa trata de adoptar, por principios, un enfoque de no intervención en la privacidad de sus usuarios.